Aprovechando una serie de avances tecnológicos que han hecho que se hayan abaratado el material fílmico y se haya llegado un poco a una especie de democratización de la expresión fílmica. Es decir, estas fuerzas creativas nos presentan sus propuestas y nos demuestran que otra manera de contar las cosas, de explicar la realidad desde el punto de vista ideológico y estético es posible. Activar el análisis, la reflexión del documental ayuda a construir nuevas actividades sociales y éticas.
Aún así, debemos prestar atención y saber qué detrás de ello se encuentran ideologías marcadas por lo que como decimos someterlo a crítica es importante, y saber que no todo se vale de una sola exposición sino que todo tiene mil vueltas que hacerle.
Ramon Breu apuesta por diez propuestas en el documental como estrategia educativa, algunos de los cineastas en los que se apoya son:
Alexandre Astruc en cual asegura que el cine evoluciona y con ello la tendencia a que los creadores cinematrográficos acaben escribiendo con su cámara de la misma forma que un escritor lo hace con su pluma.
Marc Ferro apuesta más por la utilización de una técnica básica como es la entrevista.
Jean Vigo, Luis Buñuel y Maya Deren los cuales construyeron un puente entre el cine de no ficción y la tradición del cine experimental realizado con materiales reales.
Estos autores de los que hablamos forman parte entre otros de las experiencias en este fragmento.
En manos de las nuevas
generaciones el documental es,
de nuevo,una herramienta de
intervención social,educativa y política.
